Asegurados hartos, conforman asociación y piden a Marito la cabeza de los consejeros
Falta de medicamentos, pésima atención y los casos de mala praxis son algunos de los cuestionamientos contra las autoridades del Instituto de Previsión Social, donde un grupo de asegurados pretende conformar la Asociación de Jubilados y Activos, de modo a constituirse así en un organismo de control en la previsional.
Los asegurados del IPS y jubilados mantuvieron un encuentro el pasado sábado con miras a la conformación de una asociación que nuclee a los aportantes activos en la previsional y a los jubilados. El objetivo es llegar a conformar un ente que controle a la institución que mensualmente recauda grandes sumas de dinero, pero que no brinda a sus asegurados el servicio como corresponde.
En la ocasión los participantes coincidieron en la imperiosa necesidad de aplicar medidas urgentes ante la crítica situación en que se encuentra la previsional.
El encuentro ciudadano obtuvo una importante convocatoria y además se replicó en otros puntos del país, como Alto Paraná, Encarnación, Pedro Juan Caballero, Caaguazú, entre otros sitios donde suman ya los mil asegurados que están cansados de tanta desidia y ninguneo de las autoridades.
Los asegurados que son obligados a aportar mensualmente al IPS coincidieron en sus quejas, entre las cuales resaltaron la falta de una mejor atención, la provisión de los medicamentos y óptimas instalaciones para los pacientes.
A la par de la malísima atención recibida, los asegurados también son conscientes de la rosca política empotrada en el IPS, que convirtió a la institución en una enorme financiera al despilfarrar millones en dudosas licitaciones para los amigos de siempre, por lo que también desean poner fin a la politización de la previsional.
INTERPELACIÓN A BATAGLIA, AL OPAREÍ
El pasado 16 de agosto, el titular del Instituto de Previsión Social, Vicente Bataglia, se presentó ante los diputados para su interpelación, ante los sendos cuestionamientos así como de denuncias por diversas falencias en su administración. Finalmente, el lunes venció el plazo para solicitar la convocatoria a sesión extra en la Cámara de Diputados, a fin de tratar el voto censura contra la autoridad.
Durante su interpelación, Bataglia respondió a las 44 preguntas que formaron parte del cuestionario elaborado por los parlamentarios. En la mayor parte del encuentro, se limitó a leer las respuestas que tenía preparadas de antemano. Se defendió culpando a la pandemia del covid-19 por la falta de insumos y medicamentos en el hospital, en lugar de dar explicaciones concretas.
Además dijo que solo podían verificar que la empresa adjudicada para la limpieza cumpla con el servicio contratado, esto en respuestas a las publicaciones que revelan irregularidades con la empresa Potî S.A. y Alberto Palumbo.
Así también fue interpelado por el reciente caso de presunta mala praxis que involucró a Don Ramón Samudio, a quien le habían amputado las dos piernas en el Hospital Central del IPS, pese a que inicialmente figuraba solo uno de los miembros. Al respecto reafirmó que no hubo error, al alegar que desde el inicio ambas piernas estaban comprometidas. Sin embargo, esto fue desmentido por los mismos familiares.
Respecto a la falta de medicamentos e insumos dentro de la institución, el doctor Bataglia se defendió argumentando que muchas veces se ven obligados a comprar fármacos a “los que no tienen derecho”, y ejemplificó que en los últimos tres años el IPS tuvo que entregar medicamentos por la vía judicial por valor de G. 17 mil millones.
Si bien un voto de censura contra Bataglia no era vinculante, sí implicaba una recomendación al presidente Mario Abdo Benítez para que lo remueva de su cargo ante las múltiples irregularidades durante su administración en el IPS.
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