Asfalto presidencial: datos oficiales revelan monopolio de Marito en pandemia

Mario Abdo Benítez, expresidente de la República. Foto: Archivo.

Las empresas declaradas por el expresidente Mario Abdo Benítez dedicadas a la importación de asfalto monopolizaron el rubro y dejaron muy por detrás a otras con más de 40 años en el sector. Ambas firmas consiguieron un exponencial incremento en sus importaciones del insumo básico en la construcción de rutas y sus ganancias se dispararon.

Almacenamiento y Distribución de Asfalto SA (ALDIA) y Creando Tecnología SA (Createc) son dos empresas que figuran en la declaración jurada de bienes del exmandatario Mario Abdo Benítez y ambas se dedican a la importación de asfalto. Las dos experimentaron un extraordinario crecimiento en la importación de asfalto en los últimos años, en coincidencia con la llegada de Abdo a la Presidencia de la República y su apuesta a las rutas.

Según los datos oficiales, desde el año 2017 hasta el presente, la principal empresa (ALDIA) logró aumentar sus importaciones en un impresionante 250%. Este notable incremento fue evidente durante los años 2020 y 2021, cuando la pandemia azotaba al país y el Gobierno optó más por pavimentar rutas antes que dar una respuesta más rápida a la crisis sanitaria.

En el año 2017, la empresa en cuestión importaba 12 mil toneladas de asfalto, una cifra significativa en sí misma. Sin embargo, a medida que el tiempo avanzaba, su volumen de importación se disparó hasta alcanzar las 42 mil toneladas en el año 2021. Este drástico aumento demuestra la capacidad de la empresa de Abdo para expandirse y aprovechar las oportunidades que le ofrecía el “mercado” en ese momento. En total, del 2018 al 2022, esta firma importó 159 mil toneladas.

El asfalto presidencial también tuvo éxito en su otra empresa, Createc, la cual pasó de importar 297 toneladas en el 2017 a 6.000 toneladas en el 2022, lo cual expone la buena racha que experimentaba la firma del entonces mandamás.

Estos datos revelan un monopolio en la importación de asfalto por parte de las dos empresas de Marito, logrando acaparar el mercado y ser las únicas que obtuvieron un éxito destacado en el rubro. Mientras tanto, otras empresas con una trayectoria de más de 40 años se quedaron rezagadas ante la arrolladora presencia y crecimiento de la marca oficial de ese entonces.

El diario La Nación expuso además las actas de asamblea remitidas al ex-Ministerio de Hacienda, hoy Ministe­rio de Economía y Finan­zas, donde aparecen utilidades netas de Aldia que se dis­paran año a año de manera extraordinaria. La suma de ganancias de la empresa de asfalto cuando Abdo fue presidente de la Repú­blica asciende a G. 175.268 millones, esta cifra supera ampliamente al comparar a las acumuladas en sus años de senador que fue de G. 19.480 millones. Es decir, ganó 9 veces más durante su gobierno.

La rentabilidad neta de Aldia era de unos G. 1.800 millo­nes al año, en el 2014, cuando Abdo Benítez cumplía su primer año como senador, la empresa incluso registró una leve reducción en sus utilidades del 17,25 %, disminuyendo a G. 1.492 millo­nes. Sin embargo, durante sus años de parlamentario la distribuidora fue experimentando ganancias que superaban ampliamente el volumen de facturación que tenía hasta el 2014, fue dis­parando lucro neto anuales hasta tener un pico en uti­lidades en su periodo pre­sidencial, como fue en el año 2021, ejercicio en el que consignó utilidades netas de G. 92.647 millones, en plena crisis económica tiempo en el que se veía cerrar muchas compañías.

Estos montos no apare­cen en la última declara­ción jurada presentada por el exmandatario al dejar el cargo, se observa el cobro de dividendos mensua­les no especificados de G. 338.978.534 que en un año suma G. 4.067 millones.

Cabe recordar que el artículo 237 de la Carta Magna habla de las incompati­bilidades en el ejercicio de las funciones del pre­sidente y vicepresidente, y cita que no pueden ejer­cer cargos públicos o privados, remunerados o no, mientras duren en sus funciones. Tampoco pueden ejercer el comer­cio, la industria o activi­dad profesional alguna, debiendo dedicarse en exclusividad a sus funciones; sin embargo, Mario Abdo se valió de su hijo Mario Abdo Díaz Benza en el negocio y lo puso como representante legal de Aldia.

La bonanza de Marito se registró en medio de un pico de licitaciones de pavimentación articuladas desde el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC). La prioridad que Abdo le dio a la construcción de rutas y que presentó como un gran logro, jactándose de récord en kiló­metros de asfaltados, se tra­duce en un círculo perfecto para sus negocios.

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