Sugestivo cambio en PETROPAR para adjudicar transporte de combustibles

Denis Lichi, presidente de Petropar. Foto: Gentileza.

Existen serias dudas en torno a la licitación de Petropar para el transporte de sus combustibles, por haber cambiado entre gallos y medianoche importantes puntos del pliego, aparentemente para beneficiar a alguna empresa interesada en ofrecer sus servicios.

La empresa estatal Petróleos Paraguayos (PETROPAR) lleva adelante una millonaria licitación para adjudicar el servicio de flete terrestre de sus productos, para transportar los hidrocarburos entre sus plantas y sus operadoras.


El pasado 19 de agosto se publicó en el portal de Contrataciones Públicas el llamado número 394782 para la licitación del servicio de flete terrestre por un monto máximo de 30.000 millones de guaraníes. 


Según la convocatoria, la empresa adjudicada se encargará de transportar gasoil, naftas, alcoholes, biodiesel, fuel oíl y otros derivados del petróleo de la planta ubicada en Mauricio José Troche a Villa Elisa, y de esta planta a las estaciones de servicios.


Para ello la empresa adjudicada debe contar con tres camiones cisterna sin emblema para la transferencia interna entre las plantas y otros 15 camiones con emblema Petropar para el reparto a los operadores de la distribuidora. Un punto resaltado entre sus requerimientos era que el año de fabricación del tracto camión sea del año 2003 en adelante, como así también el tanque o cisterna para los semirremolques, acoplados o tanques sobre chasis del camión.


Inicialmente para el 2 de septiembre estaba prevista la entrega y apertura de las ofertas de las empresas interesadas. Sin embargo, dos días antes de esa fecha, Petropar realizó una adenda para modificar el pliego de bases y condiciones y atrasar la apertura de ofertas, que con el cambio pasó para el siguiente jueves 10 de septiembre.


Entre los ítems modificados en el pliego figura que el año de fabricación del tracto camión sea del año 1990 en adelante. En cuanto al tanque o cisterna también deberá ser del año 1990 en adelante. Es decir, se dispuso que las empresas que tengan camiones más antiguos también puedan pujar para el transporte de los hidrocarburos.


Lo llamativo de la situación es que este cambio se realizó sin ninguna consulta de por medio y sin que haya una justificación para el efecto, por lo que existen serias sospechas de que nuevamente se estaría cocinando una millonaria licitación en la petrolera estatal.

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